HISTORIA

miércoles, 25 de mayo de 2011

PARTES DEL CUERPO EN INGLES


INGLES MODERNO

El inglés moderno temprano (Early Modern English) es la forma antigua del inglés de hoy, como una variante del idioma anglosajón y del inglés medio en particular que se practicaba hasta ese entonces.
Se trata del inglés que se hablaba principalmente durante el Renacimiento, y más comúnmente asociado al lenguaje literario de William Shakespeare.
Cronológicamente se sitúa entre los siglos XVI y XVIII en las áreas pobladas por los anglonormandos (años 1450 a 1700 aproximadamente).
Se considera la fase más evolutiva y cercana al inglés de la actualidad, y se consolidó en gran medida debido al auge de las letras británicas en dicho período 
histórico y al aporte que le dieron otras lenguas extranjeras.

viernes, 20 de mayo de 2011

INGLES MEDIO

Inglés medio

El inglés medio de los siglos XIV y XV presenta importantes cambios tipológicos respecto al inglés antiguo. El inglés medio tipológicamente está más cercano al inglés moderno y las lenguas romances que el inglés antiguo. La principal diferencia entre el inglés medio y el inglés moderno es la pronunciación. En particular, el gran desplazamiento vocálico modificó ampliamente el inventario de vocales, produciendo diptongos a partir de numerosas vocales largas y cambiando el grado de abertura de muchos monoptongos. La influencia de la nobleza normanda, llegada a la isla en torno a esta época, dejó también efectos en el léxico del inglés medio que se conservan aún hoy en día. Esto da origen, por ejemplo, la distinción entre pig (cerdo) y pork (carne de cerdo), siendo la primera de origen germano y la segunda de origen francés (las clases bajas criaban pigs que se convertían en pork para las clases altas).
A partir del siglo XVIII la pronunciación del inglés fue altamente similar a la del inglés moderno. Y es a partir de esa época que se empezaron a producir la mayor parte de los cambios fonéticos que hoy día son la base de los dialectos modernos.

INGLES ANTIGUO

Inglés antiguo

Estos invasores germánicos dominaron a los habitantes de habla celta, cuyos idiomas sobrevivieron principalmente en Escocia, Gales, Cornualles e Irlanda. Los dialectos que hablaban estos invasores formaron lo que se habría de llamar inglés antiguo, que fue un idioma muy parecido al frisón moderno. El inglés antiguo (también denominado Anglo-Saxon en inglés) tuvo la fuerte influencia de otro dialecto germánico, el noruego antiguo, hablado por los vikingos que se asentaron principalmente en el noreste de Gran Bretaña. Las palabras inglesas English (inglés) y England (Inglaterra) se derivan de palabras que se referían a los anglos: englisc e England. Sin embargo, el inglés antiguo no era un idioma unificado común a toda la isla, sino que se distinguían principalmente cuatro dialectos: mercio, northumbrio, kentish y Sajón occidental.
Desde un punto de vista gramatical, el inglés antiguo presenta muchas similitudes tipológicas con las lenguas indoeropeas antiguas como el latín o el griego, y también el alemán. Entre dichas similitudes están la presencia de caso morfológico en el nombre y la diferencia de género gramatical. El sistema verbal era más sintético que el del inglés moderno, el cual usa más la perífrasis verbal y los verbos auxiliares.


HISTORIA

El inglés es probablemente el tercer idioma del mundo en número de hablantes que lo tienen como lengua materna (entre 300 y 400 millones de personas), y el segundo más hablado, detrás del chino mandarín, si se cuenta también a quienes lo tienen como segunda lengua (200 millones de personas más).
El inglés, al extender Inglaterra su lengua por todo el mundo (Imperio Británico), y al convertirse los Estados Unidos de América en la mayor potencia económica y militar, se ha convertido de facto en la lingua franca de nuestros días.
Pese a la existencia de otras lenguas internacionales y de idiomas como el esperanto o interlingua que buscan el uso de una lengua más neutral, el inglés constituye hoy en día el principal idioma de comunicación internacional. Esto se debe a que una "civilización" dominante por lo regular no adopta otra lengua, sino que, por el contrario, impone la suya; esta es la razón por la que en muchos de los países europeos se hablan lenguas derivadas del latín, por ser esta la lengua oficial del imperio romano.
Actualmente existen propuestas para la neutralidad en el uso de una lengua auxiliar; sin embargo, desde el punto de vista económico se perderían grandes cantidades de dinero que hay que pagar durante el proceso enseñanza-aprendizaje; estos son, por ejemplo, las regalías que se pagan por los libros y material didáctico en general, además de los exámenes de certificación que hay que renovar cada cierto tiempo. De ello se deduce la negativa para adoptar una lengua internacional diferente al inglés por parte de quienes obtienen provecho con este negocio.